El Señor de Ceuta y su Madre visitan hoy por última vez la prisión de los Rosales durante el tradicional traslado
En esta última visita, el Cristo de Medinaceli procederá a la liberación del ceutí, J.M.P.S., de 29 años de edad, condenado por tráfico de drogas
La Venerable Hermandad de Penitencia y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús Cautivo y Rescatado (Medinaceli) y María Santísima de los Dolores tiene todo preparado para celebrar hoy el tradicional traslado de sus Sagrados Titulares.
Este año el traslado será más emotivo si cabe, ya que hoy será la última vez que el Señor de Ceuta y su Madre, visitarán la Cárcel de los Rosales para liberar al preso, ya que este centro penitenciario cerrará en breve sus puertas y será las nuevas dependencias penitenciarias de Fuerte Mendizábal las que aglutine a los presos, por lo que la Hermandad deberá buscar una nueva fórmula para que durante el traslado se pueda seguir liberando a un preso.
Tal y como se ha dado a conocer, tras el oficio religioso en la Capilla de San Ildefonso, realizado por el padre José Manuel González Jiménez, director espiritual de la hermandad y que está previta que de comienzo hoy a las 17.30 horas se efectuará el Solemne Traslado, el cual partirá desde la barriada del Príncipe alrededor de las 18.00 horas, cuando se abran las puertas.
El Cristo de Medinaceli de Ceuta, recorrerá la barriada y se trasladará al centro penitenciario donde procederá a la liberación de J.M.P.S., ceutí de 29 años de edad, quien se encuentra cumpliendo una condena de tres años y cuatro meses por un delito contra la salud pública y cuya libertad definitiva estaba prevista para el 28 de junio de 2018.
Hay que recordar que las gestiones realizadas durante el año 2004 permitieron que, precisamente desde la Semana Santa de aquel año, se obtengan los permisos legales para que la excarcelación sea tutelada por la Cofradía ceutí.
La “gracia” supone el adelantamiento de la libertad entre uno y dos años y no sucede como otros años donde el preso liberado podría volver a ingresar en la prisión en el caso de recaer en su causa sentencia condenatoria.
Y es que maniatado y coronado de espinas, con el escapulario de la Orden Trinitaria al cuello, la imagen del Cristo de Medinaceli, que data del siglo XVIII y es obra de Fray Juan de la Concepción, puede conservar poco de su aspecto original tras varias restauraciones, pero estas no han hecho mella en el fervor que, casi independientemente de la confesión o la Fe de los ceutíes, le brinda la ciudad en pleno.
