Las claves de la convivencia, analizadas en unas jornadas
El Centro Cultural Al Idrissi ha desarrollado esta iniciativa abierta con la actuación de un residente del CETI, natural de Camerún, y un MENA acogido por la Ciudad
Tras poner sobre la mesa, en la primera edición de esta iniciativa, las causas y consecuencias de la radicalización violenta, el Centro Cultural Al Idrissi ha querido exponer, en esta ocasión, las claves para el fortalecimiento de la convivencia. Así se gestaron las II Jornadas de Gestión de la Diversidad Cultural y Religiosa que se han desarrollado en la propia sede de la entidad, situada en los bajos del edificio Caracas en Hadú.
La coordinadora del Centro Cultural Al Idrissi, Mariam Mohamed, explicaba que el objetivo es que, de estas jornadas, surja un informe de conclusiones en el que se pueda recoger tres ejes que la entidad considera fundamentales: las administraciones y formaciones políticas, la sociedad civil organizada y los medios de comunicación. Es por ello que la iniciativa se ha estructurado en la exposición de tres paneles en las que se analizó el relevante papel que estos tres agentes juegan a la hora de conseguir una verdadera convivencia en Ceuta.
Papel de los partidos
En el caso de las administraciones, Mohamed insistía en que, sin lugar a dudas, estas son responsables de fomentar esa convivencia. Eso sí, la coordinadora del Centro Cultural Al Idrissi también reclamaba que las formaciones políticas en la oposición no instrumentalizaran esa convivencia. “Instrumentalizar para conseguir rédito partidista, ya sea la oposición o el Gobierno, viene a generar conflictos que, mal gestionados, pueden provocar fracturas irreparables en la sociedad”, advertía Mohamed.
Y es que, para la responsable del Centro Cultural Al Idrissi, la clave no es que no haya conflictos, sino la capacidad de saber gestionarlos. “Yo siempre pongo el mismo ejemplo, en una vivienda familiar se producen conflictos pero lo saben gestionar. Ese pequeño modelo se puede trasladar a la ciudad y fomentar esa buena gestión de la diversidad cultural y religiosa”, apuntaba Mohamed.
La coordinadora del centro se mostraba “cansada” de que expertos, provenientes de otros puntos del país, vinieran a Ceuta para “darnos clases magistrales sobre convivencia cuando Ceuta es una ciudad que lleva siglos viviendo de esa manera”, recordaba. No obstante, Mohamed también reconocía que hay determinados espacios donde, simplemente, se da una coexistencia. “En la mayoría de los casos, o durante muchos años, ha habido una convivencia mayoritaria y tenemos que analizar qué es lo que ha ocurrido para que, en determinados espacios haya dejado de existir esa memoria compartida que al final favorece la convivencia”, reflexionaba Mohamed.
Sobre esos espacios, la coordinadora del Centro Cultural Al Idrissi considera que hay algunas barriadas que, debido a la demografía de la ciudad, en las que se ha ido concentrando un número concreto de población. “No es imposible la convivencia, pero es más difícil generar la memoria compartida. Los más pequeños, y parte de la juventud actual, no vive en sus centros educativos ese espacio intercultural que favorece esa memoria compartida para garantizar una convivencia más real”, incidía Mohamed.
Sociedad civil
Por su parte, la coordinadora del proyecto ICI de Cruz Roja, Sandra Ros Martínez, incidía en la importante labor que debe desempeñar la sociedad civil. “Nosotros, desde el proyecto ICI, entendemos que hay tres pilares que tienen que participar en cualquier proceso comunitario: la ciudadanía, la administraciones y las entidades privadas. Estas últimas tienen mucho que aportar como promotor de actividades”, apuntaba Ros quien basó su intervención no sólo en hablar del proyecto en cuestión, sino también en el marco conceptual con el que trabajan, es decir, la definición de la convivencia o la interculturalidad o qué espacios se están generando para propiciar la participación y conseguir aunar esfuerzos para conseguir una buena convivencia en las barriadas ceutíes.
El consejero de Educación, Javier Celaya, ha intervenido en la inauguración de las jornadas. Un intervención en la que ha solicitado una mayor “permeabilidad” entre las características culturales de los diferentes grupos. “Debe haber un cierto aprecio o admiracion hacia determinados aspectos, como la gastronomía o la música, de otras culturas”, ha apuntado.
Precisamente la música también ha sido protagonista durante el evento con la actuación de un residente camerunés del CETI y un MENA que han interpretado una canción compuesta por el primero. Una letra que recordaba la suerte de tener la opción de buscar una vida mejor.
