El ejemplo de lealtad de Ceuta con sus ciudadanos
Ceuta atraviesa por un momento crucial y donde las decisiones que se tomen pueden deparar el futuro de la ciudad para los próximos años. Nos referimos a la puesta en marcha de la aduana comercial, con todo lo que ello supone para la economía ceutí, la cesión de suelo por parte de Defensa, el Plan de Vivienda que permitirá construir más de mil viviendas en Ceuta en los próximos cuatro años, tanto para venta como para alquiler, a precios asequibles o la necesidad de la situación con los menores extranjeros no acompañados que son tutelados de por la propia Ciudad y que necesita de la reforma actual de la Ley de Extranjería para que se pueda proceder al traslado de hasta 400 menores a diferentes puntos de la península.
Todo lo que no sea tener estos cuatro puntos de cara al presente y futuro de nuestra tierra es querer obviar la realidad, no ser consciente del día a día que vivimos o pasar olímpicamente de las necesidades y preocupaciones de Ceuta.
Por ello, en un ejercicio de responsabilidad y transparencia, el presidente Vivas volvió a comparecer este miércoles ante los medios de comunicación -como lo hizo la delegada un día antes- para dar cuenta de la actualidad ceutí, dejando claro -una vez más- que la “lealtad institucional” y el “consenso” son “denominadores comunes” y una “prioridad” cuando se trata de defender los intereses generales de Ceuta y de sus ciudadanos, como es el caso en materias como la aduana comercial, vivienda o menores.
Está muy bien que los partidos nacionales busquen su rédito político, pero en esta tierra, tan especial como única por su situación geográfica, sus singularidades, paisajes, gastronomía y al tratarse de una ciudad fronteriza, nadie mejor que los dirigentes de Ceuta para poder defenderla. Y es que está más que visto y comprobado, del Estrecho hacia arriba, todos -sin excepción- hacen políticas basadas en el encontronazo, el “y tú más”, la deslealtad, el egoísmo y las ansiadas de poder. Por eso, no estaría demás que los máximos responsables políticos de nuestro país echasen un vistazo a Ceuta y pusieran en práctica la lealtad institucional que existe entre el Gobierno de la Ciudad y la Delegación del Gobierno, donde tanto presidente como delegada, aparcando ideologías políticas, son capaces de darse la mano, remar en la misma dirección, trabajar de manera coordinada y mostrarse la lealtad a la que nos referimos, en beneficio de nuestra tierra y su gente. Es la política que se echa en falta ante un panorama político nacional cada vez más preocupante y decepcionante.
Pérez y Vivas marcan el modelo. Y es que los políticos están para velar por el bienestar, la seguridad y el interés general de los ciudadanos. Eso, lamentablemente, parece haber pasado a un segundo plano, pues la única realidad cuando uno escucha a los líderes principales de las diferentes formaciones políticas de España, es que cada uno vela por su sillón y su interés particular. Simplemente, tan preocupante como real.