Piden cinco años de prisión para un guardia civil que hacía la ‘vista gorda’ en el Puerto para el pase de hachís

Dos hermanos que organizaban los pases y cargaban los vehículos de hachís, varios transportistas o ‘chóferes’ que conducían sus coches rumbo a la península por unos 4.000 euros, un vigilante en ciertos puntos de Ceuta y la clave: un guardia civil que supuestamente hacía la ‘vista gorda’ en el Puerto para garantizar la operación de tráfico de drogas y para el que la Fiscalía pide al menos cinco años de prisión. Este martes comenzó el juicio en la Audiencia Provincial por esta investigación llevada a cabo en 2023 por la Policía Judicial y que se prevé que se alargue dos días debido al alto número de testigos.

Según ha podido saber El Pueblo de Ceuta a través de fuentes jurídicas implicadas en el caso, el Ministerio Público ha ofrecido rebajar su solicitud inicial de seis años de prisión -además de por un delito contra salud pública, por una supuesta organización criminal- al menos a cinco acusados externos al cuerpo de la Guardia Civil, que evitarían entrar en la cárcel. Se espera que el miércoles continúe el juicio con la declaración del agente implicado.

Sobre las 10.30 de la mañana ya estaba todo listo en la Audiencia Provincial de Cádiz con sede en Ceuta, donde había un gran revuelo de personas debido a la cantidad de acusados y de testigos; la mayoría de estos últimos, guardias civiles, que superaban la treintena. Los primeros en declarar fueron los que se sentaban en el banquillo, excepto el agente de la Benemérita implicado supuestamente en que los pases de drogas culminaran con éxito. Este último pidió hablar al final de la causa y la solicitud le fue concedida por la sala.

Cinco de los seis acusados -el octavo falleció a principios de este mes de junio- señalaron directamente al agente A.L. y lo definieron como el artífice de que los pases de droga llegaran a la península. La historia que narraron los dos hermanos que se encargaban de organizar toda la operación tiene su semilla en una ferretería de Ceuta que ambos -H.C. y M.C.- regentaban.

Fue allí donde conocieron al agente supuestamente implicado, ya que iba de manera habitual a comprar herramientas y demás productos. Según los dos hermanos, del trato diario nace una amistad que es aprovechada tanto de una parte como de otra para sacar ese beneficio económico a partir de la actividad ilícita.

Los dos hermanos comienzan entonces a organizar los pases según el cuadrante del Guardia Civil y consiguen aglutinar a vecinos y conocidos del barrio para que se encarguen de transportar la droga. Los jóvenes aceptaron después de que H.C. y M.C. le pintaran la operación de ‘color de rosa’: sencilla al tener la connivencia de un agente de la Benemérita. Según la declaración de los acusados -que admitieron haber cruzado con sus vehículos repletos de droga desde Ceuta a Algeciras en varias ocasiones- el beneficio económico siempre rondaba entre los 4.000 y los 6.000 euros.

A todos los chavales que participaban en la red de los hermanos se les sumó otro hombre que también conoció a los cabecillas en la ferretería y que, según explicó este martes, realizaba labores de vigilancia y avisaba de cualquier control de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Tras varios pases exitosos parecía que nada podía salir mal, pero al otro lado del Estrecho no había ‘compinches’.

En el año 2023 fue cuando se desmontó esta estructura después de que la Guardia Civil de Algeciras interceptara dos vehículos en fechas diferentes. En junio, los agentes detienen a H.A. con 90 kilos de hachís que, según su testimonio, le cargó en el coche uno de los hermanos, H.C. La droga iba escondida tanto en la parte trasera como en el salpicadero. No dudó el acusado en señalar al agente A.L. cuando el fiscal le preguntó qué guardia civil le permitió pasar aquel día. “Fue él y estaba de servicio”, explicó.

Los dos pases frustrados -de los ocho que les imputa la Fiscalía-, fueron practicados tanto en marzo como en junio de 2023; uno en Ceuta y otro en Algeciras.

El primer detenido por este hecho el 10 de marzo del mismo año fue J.E.K. -el primero en declarar en la mañana de este martes- a bordo de un Chevrolet K2. Los agentes lo vieron “nervioso” y, tras el registro en el taller, se encontraron 20 kilos de hachis en el depósito de gasolina en un doble fondo. Todo según los dos guardias civiles que ese día estuvieron de turno de mañana (de 5.00 a 14.00 horas). En el turno de esa tarde trabajaba en el Puerto de Ceuta el acusado A.L., que llegó a su puesto sobre las 13.45, pero ya habían descubierto a su supuesto 'socio'.

Otro acusado que ha reconocido los hechos, H.A., fue detenido el 2 de junio de 2023 a las 14.00 horas en Algeciras con más de 90 kilos de hachís escondidos en el parachoques y en el compartimento del aire acondicionado del coche que conducia, un Ford Focus blanco. También ha confesado haber hecho el pase en al menos dos ocasiones más. Una vez aprehendido fue trasladado a la Comandancia de Ceuta para que se continuará con las diligencias.

La abogada de M.C., uno de los hermanos, planteó durante la vista que su cliente en 2023 estaba pasando por un mal momento y que estaba incluso en tratamiento. Según narró su defendido, desde pequeño había estado inmerso en adicciones a sustancias como la cocaína, el hachís y “las pastillas”, y realizaba actividades ilícitas para, entre otras cosas, seguir consumiendo.

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