Los sindicatos sanitarios advierten: no apoyarán el Estatuto Marco sin mejoras retributivas ni jubilación anticipada

Las organizaciones sindicales con representación en el Ámbito de Negociación del Sistema Nacional de Salud (SNS) han lanzado este lunes un mensaje claro al Ministerio de Sanidad: no respaldarán el nuevo Estatuto Marco del personal estatutario si no incorpora dos demandas que consideran trascendentales: una nueva clasificación profesional con su correspondiente adecuación retributiva y el reconocimiento del derecho a la jubilación voluntaria, anticipada y parcial sin pérdida económica.

SATSE, FSS-CCOO, UGT, CSIF y CIG-Saúde, que representan a una parte sustancial del casi millón de profesionales afectados por esta ley, han manifestado en rueda de prensa su malestar por el desarrollo de la negociación, a la que acusan de estar marcada por la falta de información, los altibajos constantes y una gestión desleal por parte del Ministerio que dirige Mónica García.

Según los sindicatos, mientras ellos han mantenido una actitud “reivindicativa y exigente” pero leal, evitando hacer públicos detalles de la negociación, desde el Ministerio se han trasladado propuestas parciales a través de redes sociales y declaraciones públicas, ejerciendo presión en aspectos que aún no estaban acordados.

Uno de los principales motivos de desencuentro es el último borrador de anteproyecto remitido por Sanidad el pasado viernes, que los sindicatos califican directamente de “tomadura de pelo”. El texto, aseguran, supone un retroceso respecto a acuerdos ya alcanzados, como la posibilidad de que el nombramiento de sustitución permitiera acceder a la jubilación parcial voluntaria. Además, no incluye una regulación común sobre jornada laboral para todas las categorías, manteniendo particularidades que consideran inaceptables.

Además de la mejora retributiva y la jubilación anticipada, los sindicatos reclaman la extensión de la jornada de 35 horas semanales para todo el personal, el reconocimiento del tiempo de solape entre turnos, y una mejor planificación de la jornada ordinaria y complementaria. Consideran que estas medidas son esenciales para reducir la sobrecarga asistencial, mejorar la conciliación y garantizar la calidad asistencial.

También piden que el Estatuto Marco incluya la actualización de funciones por categorías profesionales y una negociación específica sobre los aspectos retributivos de la nueva clasificación y las condiciones de jubilación.

Ante la falta de avances en estos puntos, las organizaciones han anunciado que iniciarán movilizaciones conjuntas si el Ministerio no accede a abrir una negociación específica sobre estas cuestiones. La presión sindical, advirtieron, irá en aumento con el horizonte de una posible huelga general en el ámbito sanitario.

Avances insuficientes

Pese al tono crítico, las organizaciones sindicales reconocieron que el trabajo realizado en la mesa del Ámbito ha permitido introducir mejoras importantes en el Estatuto Marco. Entre ellas, destacan la creación de un nuevo modelo de clasificación profesional adaptado a la formación y competencias de cada categoría, la convocatoria obligatoria de procesos selectivos al menos cada dos años, y un Concurso de Traslados Abierto y Permanente en todos los servicios de salud.

Otros avances incluyen la programación anual del trabajo, el derecho a conocer con antelación la cartelera de turnos y la exención de trabajo nocturno para mayores de 55 años sin merma retributiva. También se prevé aumentar los niveles de carrera profesional de cuatro a cinco, facilitar el acceso a la formación continuada en horario laboral y proteger el salario en casos de baja médica o embarazo.

En cuanto a la promoción interna, se garantizará el cobro de la carrera profesional y la consolidación de trienios en categorías superiores. Además, se introducen medidas para profesionalizar la gestión, permitiendo el acceso a puestos de responsabilidad a quienes cuenten con la cualificación adecuada, sin limitarlo a determinadas categorías.

La rueda de prensa estuvo protagonizada por Laura Villaseñor (SATSE), Lucía García (CCOO), Begoña Ballell (UGT), Fernando Hontangas (CSIF) y Manuel G. Moreira (CIG-Saúde), quienes insistieron en que el objetivo compartido es lograr un texto legal que realmente beneficie a todos los trabajadores del SNS.

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